Juan Antonio de Ybarra e Ybarra

29 de noviembre de 2015

 

Acierta ABC al reproducir hoy una frase atribuida a Otto von Bismarck para explicar el proceso degenerativo de España como nación: «Estoy firmemente convencido de que España es el país más fuerte del mundo. Lleva siglos queriendo destruirse a sí mismo y todavía no lo ha conseguido. El día que deje de intentarlo, volverá a ser la vanguardia del mundo».

Dice bien ABC al referirse a las guerras civiles del carlismo y luego a la historia del siglo XX para justificar ese proceso degenerativo que viene sufriendo la propia identidad de España. Una excepción frente a otros Estados que se sienten orgullosos de sus símbolos y de su historia.

El proceso de la unidad política de España se comenzó durante la Edad Media y quedó consolidado con los Reyes Católicos mediante los sucesivos pactos que realizó la Corona con los distintos territorios de España en el transcurso de la historia. Se podría decir que entonces se dieron los supuestos políticos de un Estado federal, porque esos territorios que se iban incorporando a la Corona de Castilla contaban con lo que hoy llamaríamos "un poder constituyente originario". Pero una vez lograda aquella unidad política en el siglo XVI, con el paso de los siglos, España se convirtió en un Estado unitario centralizado y se fueron vulnerando aquellos pactos que dieron lugar al nacimiento de la soberanía española, o lo que es igual, al nacimiento de su unidad política.

"El Vuelo de los Halcones" es una llamada de atención, una advertencia para que se respete la verdad de la historia. Si se manipula la historia de los pueblos que permitieron que España existiera, corremos el peligro de que surjan nuevos descontentos y nos encontremos ante graves dificultades de convivencia.